Ocurre Siempre Al Hablar En Público

Mira, te voy a contar algo que ocurre siempre.

El 100% de las veces.

Sin excepción.

 

Ocurre cuando digo que me dedico a dar clases para hablar en público. 

 

Todo el mundo dice:

 

Guau, qué interesante. 

Guau, cuánta falta me hace.

Guau, eso es súper necesario para el día a día.

Para las ventas, para el trabajo. 

Para relacionarte con tus hijos, para relacionarte con tu familia. 

Para dar un discurso en la boda de tu primo. 

Y yo sé que es así.

Eso es algo que no tiene discusión. 

 

No importa lo que vendas, no importa lo que te dediques, no importa. 

Porque somos seres sociales y necesitas comunicar lo que llevas dentro, tanto en lo personal como profesional. 

 

Y si no lo haces, no existes.

 

Comunicar es vivir.

Es exactamente lo mismo. 

No eres un ermitaño. No tendrías internet. 

 

Así que a no ser que andes perdido en la montaña o en una cabaña, o vete, tú vas a ver dónde, eres un ser social y necesitas hablar en público. 

Y no, no consiste en cogerte una plantilla estupenda de KeyNote o de powerpoint y hacer una presentación estupendísima y maravillosa.

 

Preciosa, pero hueca.

 

Y tampoco consiste en imaginarte a tu audiencia en pelotas. 

 

Y tampoco consiste, siento decirte, en dividir la audiencia en tres y hacer un barrido con la mirada para que todos se sientan incluidos. 

 

No consiste en nada de eso, consiste en que aprendas a hacerlo, porque nadie nos enseña. 

En esta nuestra comunidad nadie, señores, nadie, señoras, nos enseña a hablar en público. 

Y eso es una verdad como una catedral. 

 

Yo te hablo de España, porque es lo que conozco, no por tirar tierra ni por nada.

 

Nadie nos enseña a hablar en público, más bien, al contrario. En el colegio nos castigan saliendo a hablar en público. 

 

Sabes de lo que te hablo, ¿eh?. 

 

Suscríbete a mi boletín. Es el mejor consejo que podría darte (para empezar).

 

Feliz día.

Silvia

 

Suscríbete y recibe el 

El Ebook de 20 páginas

Los 5 errores hablando en público (o como evitar la catarsis del tomatazo)